Su influencia en la música
Mancini solía trabajar un patrón rítmico con el compás 4/4 (también 3/4) y un estilo jazzístico que combinaba los coros con una música muy melódica. Se le podría denominar un romántico ‘empedernido’ con dulces baladas muy bailables. Profesional que se movía muy a gusto en todo el espectro musical de una banda sonora; Compositor del score, de canciones, llegando a crear su propia orquesta que tuvo un gran prestigio.
A principios de la década 1960, los estudios de Hollywood comenzaron a alejarse de los sonidos sinfónicos tradicionales que habían servido de telón de fondo para las películas. Mancini contribuyó a esta tendencia al ofrecer alternativas que tenían una partitura instrumental más escasa, pero llena de color con temas fáciles de cantar. Encabezó un cambio en la composición de las películas, reemplazando el uso de agrandes arreglos orquestales con una música más popular.
Su música se caracterizaba por líneas melódicas limpias, generalmente en piano, con un trasfondo de trompas y cuerdas francesas. Su sentido del ritmo acompañado siempre con magníficos coros le dieron una personalidad muy definida y reconocible. Del mismo modo que otros compositores como Tiomkin o más cerca de nuestra época Horner, hacía una canción como tema principal de la banda sonora. Era su sello personal. Una huella fácilmente identificable con su estilo.
En su trabajo de estudio, Mancini hizo un esfuerzo por romper las barreras preexistentes e introducir el jazz y las influencias contemporáneas en la música de cine que en el pasado había sido predominantemente influenciada y servida por músicos clásicos. Grabó música para la banda sonora, para que esta se mantuviera por sí sola incluso sin la película.