Con un talento especial para el piano trabajó en la ‘Sinfónica de Chicago’, Detroit y otras. En los años veinte experimentó con el Jazz y en los años treinta escribió canciones para artistas como Alice Faye.
Finalmente, a partir de la década de los cuarenta, y junto a su amigo y pareja profesional Sammy Cahn (letrista) sería autor de extraordinarias canciones y musicales para el cine.
De el dijo Frank Sinatra; ‘¡He tenido el placer y el privilegio de interpretar sus maravillosas melodías en muchas películas memorables, así como las mejores salas alrededor del mundo! Admiro sus canciones como ‘People’, ‘Never never land’, ‘Just in time’, ‘The party’s over’, ‘Three coins in the fountain’, y el favorito de mi esposa, ‘Diamonds are a girl’s best friend’. Sólo hay un Jule Styne, y le quiero’.